AJOBLANCO

miércoles, octubre 02, 2013

Hoy vengo con un clásico de la cocina andaluza  y también extremeña, que aún no había pasado por mi cocina virtual. Es junto con el gazpacho y el salmorejo una de las señas de identidad de nuestra gastronomía. Y en época de uvas lo hacemos con más frecuencia porque es una forma de acompañarlo. Lo había preparado alguna que otra vez en mi casa, pero cuando probé el de Begoña hace tiempo pensé que esa iba a ser mi receta definitiva, ya que tiene el punto de equilibrio perfecto entre el ajo, la almendra, el pan y el agua, lejos de otros ajoblancos, más típicos de Almería, que se sirven untados en pan, como el que hace mi amiga Lola, cuyo nombre de su blog es un homenaje a este plato. El ajoblanco de Almería es un poco más pesado, con más ajo, pero, sin duda, hay muchas personas que se decantan por él, aunque yo, personalmente lo prefiero más ligero, sobretodo por los efectos gástricos que puede provocar después de tomarlo.

 INGREDIENTES:

  • 200 gr. de almendras crudas
  • 150 cl.. de aceite de oliva virgen extra
  • 3 dientes de ajo
  • Vinagre de jerez
  • Un tazón de miga de pan blanco
  • Sal
  • Agua
  • Uvas


 PREPARACIÓN:
La forma artesanal y tradicional de hacerlo es con el mortero, aunque yo lo he hecho con la thermomix, y si no la tenéis podéis hacerlo con una batidora. Ponemos en el vaso las almendras, el aceite el ajo y la sal y trituramos muy bien. Mientras, habremos puesto la miga de pan en remojo.

Después añadimos la miga de pan y el vinagre. La cantidad de vinagre dependerá del gusto, es preferible quedarse corto e ir añadiendo un poco más después que añadir mucho y luego no poder rectificar. Mezclamos bien  y añadimos un poco de agua, hasta que veamos la mezcla suelta y no muy espesa.
Metemos en el frigorífico hasta la hora de servir. Cuando vayamos a servir comprobaremos de nuevo el espesor de la mezcla, seguro que en el frigorífico habrá espesado un poco, por lo que podemos aligerar la mezcla con un poco de agua fría hasta conseguir la textura ideal. La foto de abajo está hecha después de sacar del frigorífico, y, después, a la hora de comerlo, le añadí un poco más de agua, pero eso va al gusto del comensal. Acompañamos con uvas, lo normal es que sean moscatel, aunque las que yo puse eran de otra variedad, sin pepita.
Aún apetece este ajoblanco, aunque debemos ir dando paso a los platos de cuchara y otro tipo de sopas calientes que van apeteciendo ya con el cambio de estación.
Lidia.

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16 comentarios

  1. Me encanta con una uva sin pepitas llamada sultanina que mi hermano tiene injertada en una parra en el pueblo. Se me antoja así delicioso. Tengo que probar yo estas proporciones y esta textura, es cierto que el almeriense de Lola, pese a estar muy rico, caray como atizaba en las sobremesas y tardes después de comerlo jajaja.

    Un saludo.

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  2. No he probado el ajoblanco nunca, pero viendo los ingredientes tiene que ser bien rico.
    Un besote

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  3. Aún siendo típico andaluz y extremeño, en casa de mis padres siempre ha sido un plato que no falta, debido a la proximidad que tenían con Córdoba (ellos son manchegos), y siempre me trae muy buenos recuerdos.
    Te ha quedado muy rico, y la verdad es que nunca lo he probado con uvas, así que ya va siendo hora, jeje!

    Besos!

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  4. Tendría que darle una segunda oportunidad...

    Lo probé hace años y me pareció superfuerte, pero con lo que me gustan esos sabores me da a mi que fue cosa del cocinero y no del pobre ajoblanco como tal...

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  5. vaya ajoblanco más bien hecho, me encanta la cocina que viene del sur. un besoteeeeeeeeee.
    como agua para chocolate-myriam

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  6. Oooooooooooooooh no conocía esta receta es algo que no he probado nunca pero tiene un aspecto riquísimo.
    Besos.

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  7. Es una receta deliciosa y muy fresquita para el verano.
    Besos.

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  8. Este es un plato que no me termina de convencer y creo que se porqué, siempre lo compro de los de brik, nunca lo he hecho en casa y el gusto que tienen los de bote imagino que será completamente distinto al natural... a mi marido le gusta tanto que al final tendré que hacerlo.
    Me cojo tu receta. Gracias.
    Nieves

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  9. Mi querida Lidia quieres creer que nunca lo he probado, y la verdad que este tuyo tiene una pinta deliciosa, asi que no voy a tardar en hacerlo. Mil besicos tesoro

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  10. Creo que te ha quedado en su punto justo y perfecto el quitar las pepitas a las uvas!
    Un beso

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  11. Me encanta el ajoblanco,de hecho fue uno de los primeros platos que preparamos en De norte a sur, es una receta que sorprende mucho al que la prueba de primera vez y si te gusta, lo vas a comer cada verano sin falta, es perfecto.
    Un besito.

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  12. Ahora conviven en nuestras mesas platos frescos con otros más calientes, este ajoblanco es muy apetitoso, con una rica textura y sabor.
    Besos.

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  13. Los platos de toda la vida no necesitan nada para gustar a todo el mundo, el ajoblanco es así. A tí te ha quedado perfecto, se ve en esa textura tan estupenda. Bs

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  14. En casa es todo un clásico, pero una cosilla...el de Almería realmente no sabe tanto a ajo, es muy suave y proporcionado, ahora si alguien se pasa de ajo...eso ya es otra cosa jajaja

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  15. Lidia me alegra que hayas hecho el Ajoblanco, tu sabes que a nosotros nos encanta, y a ti te ha quedado genial y la textura entre dos aguas. Tanto con uvas como con pan esta riquísimo y muy sano y saludable, dieta mediterránea 10%.
    Bsss desde la tierra del Ajoblanco, Almeria.

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  16. Me encanta el ajoblanco, pero nunca me he atrevido con él, con tu receta me voy a animar
    Muchas gracias

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