Quien guarda halla. Eso pensé la primera vez que hice conservas. A partir de entonces han sido muchos los botes de conservas que han ocupado mi despensa durante muchos años. Mermeladas, confituras, chutney, tomates secos en aceite, queso en aceite, bonito en aceite.....y una receta muy parecida a la del bonito, la que os traigo hoy. Este atún en conserva que preparé en verano y que ahora está listo para ser consumido. La receta se la vi a Chelo, de la que si seguimos todas sus recetas de conservas, encontraremos un buen manual para convertirnos en unos expertos en el tema de conservas. Cuantos más meses pasen desde su envasado aún será mejor. Yo he abierto el primer botecito a los tres meses, que es el tiempo mínimo que se aconseja tener en conserva. Algún otro bote lo regalé, y los que me quedan los voy a guardar para acompañar nuestras ensaladas de Navidad.
Aquí todavía seguimos de fiestas, por lo que hoy os traigo un plato muy sencillo que podréis elaborar en poco tiempo y que tendrá un resultado espectacular. Si os gustan los tallarines picantes, también tienen su toque picante con la guindilla que le he puesto. Al salmón ahumado y a las gulas (o también podéis poner anguriñas) le hemos añadido unos tomates secos caseros. El resultado una receta de tallarines picantes riquísimos, carentes de salsas calóricas y que si os gusta el picante y las gulas seguro que os encantarán. Para realizar la receta he usado un Aceite de oliva virgen extra elaborado en Torredonjimeno (Jaén), en la Cooperativa Nuestra Señora del Carmen (aquí os dejo el enlace de su página web que es preciosa). Podéis encontrar este AOVE en varios formatos, como ésta botella edición lírica de 200 ml. que os enseño junto a una edición especial, la botellita cuadrada, conmemorativa del aniversario de la cooperativa.
Hoy os traigo un guiso tradicional de los pescadores del País Vasco y Cantabria. El nombre proviene de la palabra marmita, que es el recipiente donde se preparaba el marmitako a bordo de los barcos y en la cocina vasca es un guiso a base de pescado (bonito, atún) y patatas,muy difundido entre los pescadores ya que ellos mismos lo preparaban en los barcos. Existen variantes de esta receta, según la provincia, pero siempre el resultado es el mismo, el de una receta muy sabrosa a base principalmente del pescado, atún o bonito, patatas, pimiento, cebolla y en algunas ocasiones también tomate o pimentón. Yo no le he puesto ninguno de éstos dos últimos ingredientes. También he triturado el sofrito, por eso de que no se vea nada más que atún y patatas en el plato y los niños no pongan pegas.
Yo no se a vosotros si os pasa, pero a mi cuando me regalan huevos frescos, lo único que me apetece hacer con ellos es recetas donde éstos sean los protagonistas. Ya son muchas recetas publicadas con los huevos como protagonistas, y cuando me regalaron éstos se me ocurrió preparar unos divertidos huevos al nido que había visto en multitud de blogs. Los panecillos pueden rellenarse casi de lo que sea, pero el huevo tiene que ir coronando el panecillo. Me gustó mucho la versión de Mary, con chorizo, y, a falta de hornear panecillos en pleno verano, compré estos panecillos de hamburguesa en la panadería. No tienen por qué ser panecillos de hamburguesa, pero lo suyo es que sean blanditos, ya que van horneados después.
Después de unos días intensos de fiestas y muchas comidas lo que apetece es hacer comidas algo más ligeras, como esta ensalada que convertí en plato único para almorzar. Una completa ensalada de arroz, a la que se unieron otros productos que andaban por la despensa esperando su uso. Lo que convierten a esta ensalada en una ensalada de aprovechamiento, con un resultado altamente recomendable. Le acompaña una vinagreta de salsa de soja que le aporta un sabor muy especial. Otra ensalada que aporto al reto #ponunaensalada2014, con el que conseguir un recetario de ensaladas ideal para hacer más sano nuestro verano.
Sigo sorprendiéndome de mi misma, no es normal como han cambiado mis gustos en estos años, como me gusta ahora comer de todo crudo, como alucino cuando pruebo un nuevo tartar y veo que me encanta. El de atún nunca lo había hecho en casa, pero sí que lo había probado fuera. No es atún rojo, puesto que aquí no es fácil encontrarlo, ni es solomillo de atún, puesto que en la pescadería sólo tenían parte de la aleta para vender, pero el resultado ha sido delicioso. Junto con el aguacate, el tomate y el toque de cítricos que le pone la lima es ideal. Además aderezado con un AOVE de premio, como es el Dominus Cosecha temprana y maridado con un vino rosado bien fresquito para la ocasión, el Señorío de Sarria. La receta la he visto, con algunos cambios, en el libro " Un país para comérselo"
Aún no he tenido tiempo ni de reponerme del encuentro gastroblogero de #Almuñécar, del que os traeré un resumen a lo largo de la semana, pero mientras el blog sigue, y hoy tocan estos mejillones en escabeche, unos mejillones que me regalaron recién cogidos, unos mejillones que estuve limpiando más de una hora pero que después valió la pena hacerlo, ya que son los mejores y más sabrosos que he tomado nunca. Son unos mejillones de roca, más pequeños que los que se venden habitualmente pero con mucho más sabor. Pensé hacerlos en salsa picante, pero al ser tan pequeños decidí aprovecharlos para escabecharlos. Hacía años que no lo hacía, pero después de éstos tan buenos, no voy a esperar a que pasen tantos años para volver a hacerlos. He visto muchas formas de hacerlos en escabeche, pero éstos no necesitaban muchos ingredientes, sólo AOVE, vinagre, laurel y un poco de pimentón.
Hoy os traigo al blog un plato de la cocina francesa. El Tartiflette es un plato formado por patatas cocidas, bacon, nata, queso Reblochon y cebolla, principalmente. Según la Wikipedia fue un plato que nació en los años ochenta para aumentar las ventas del queso Reblochon, aunque podemos sustituirlo por otro, de hecho yo le he puesto queso brie. Por aquí no es fácil buscar productos que se salen de la normalidad, aunque supongo que en Alcampo sí que lo habrá. La proxima vez que vaya lo buscaré. Tratándose de un plato francés sorprende que no lleve mantequilla, por lo menos en la receta que yo he hecho, que se la vi a MJ, en su lugar lleva AOVE, y como yo, por suerte, tengo una colección de los mejores en esta ocasión le puse otro de los que me traje de GastroAOVE.
Hace semanas que decidí qué receta iba a robarle a Libia de su cocina, o mejor dicho, de su blog, Tartis y más. El problema es que se me olvidó que hoy era último domingo del mes, y publicación del reto Asalta blogs y pensaba que nos metíamos en el siguiente, hasta que ayer caí en la cuenta. Y anoche tuve que preparar estas salaíllas o saladillas deprisa y corriendo. Fueron unas salaíllas exprés..con muy buen resultado, pero digo lo de exprés, porque llevaban prefermento, y por la imposibilidad del tiempo, no pude hacerlo. La propia Libia comenta en su post que un tío suyo las hace sin prefermento y quedan igual de bien, por lo que, como era la receta que quería preparar, prescindí del prefermento. Las salaíllas o saladillas son unos panes planos con sal gorda y aceite de oliva por encima. Son típicos de la provincia de Granada, y además se suelen consumir en Primavera y, más concretamente, en festividades, como la de la fiesta de la Cruz, que se celebra el próximo 3 de mayo.
Este año ha sido el que menos dulces de Semana Santa he comido, pero sólo de verlos estoy ya cansada....necesito un relax (seguro que no por mucho tiempo), por lo que lo único que me apetecen sólo platos salados y fruta, que compensen. Esta ensalada es ideal para ello y además para aprovechar los restos de bacalao que nos hayan podido sobrar de la Semana Santa. Esta ensalada de bacalao o Esqueixada es un plato típico de la cocina catalana, muy básica pero que ha traspasado fronteras geográficas. Los ingredientes básicos son los que os pongo, aunque el pimiento verde y rojo también es habitual, así como otros ingredientes que se pueden añadir. Con esta ensalada os quería comentar que he colaborado con la guía gastronómica HouseTrip, hablando de la cocina catalana, en el enlace podéis ver una recopilación de las recetas más famosas de la cocina catalana, de sus restaurantes más emblemáticos, así como sus mercados.
En Semana Santa el bacalao es el rey, y una de sus compañeras de equipo son las espinacas. El de hoy es un plato básico que vi en una revista, poco calórico, fácil de preparar, y sin calentamientos de cabeza para desalar el bacalao, ya que lleva filetes de bacalao fresco, de fácil compra en pescaderías. De nuevo la materia prima es la protagonista del plato: espinacas, bacalao, cebolleta, zanahoria, vino, caldo de pescado y un AOVE de calidad, como el que hoy os presento, que fue otro de los que se vino de GastroAOVE, Olisierra Gourmet de la S.C.A. Nuestra Señora de la Fuensanta, cuya característica principal es ser muy afrutado.
Seguimos probando los AOVEs que me traje de GastroAOVE, Bravoleum ha sido uno de los ocho AOVEs de Jaén Selección 2014, uno de los ocho primeros de este año. Ya os imaginaréis la calidad que tiene. Está catalogado dentro de lo que se conoce como Aceite de Oliva Vírgenes Extra de Alta Gama. Es de variedad picual. "Conseguido entre los meses de octubre y noviembre y mediante extracción en frío, es un aceite agradable al paladar, poco picante y muy tenue amargor hace que los sabores frutados de aceituna verde, almendra dulce, tomate e incluso plátano nos dejen un sabor incomparable.". No he querido arriesgar mucho con el maridaje de este AOVE. Por lo que he ido a lo seguro y he preparado el mismo plato con el que lo maridaron desde el catering Mas sabor en la cena que nos ofrecieron en Martos: un timbal de patatas a lo pobre con huevo y gulas. Si no os gustan las gulas el plato no os gustará, pero si os gustan, el plato es espectacular, recordando a los huevos rotos con patatas y gulas. La calidad de cuatro productos convierten a este plato en un plato de lujo.
Para empezar la semana un plato completísimo de pasta, pollo, verduras y salsa de soja. Mi amiga Maribel me habló de la pasta que preparaba el cocinero del Restaurante La Bahía (Playa del Peñón, Salobreña), donde ella trabaja, para el personal del restaurante. Me dijo que era una pasta con verduras y que estaba muy buena, así que me interesé por el plato, y me comentó los ingredientes que le ponía. No se si se parece al plato que ellos toman, pero creo que en esencia tiene que ser muy parecido. En casa nos ha encantado, la mezcla de verduras es brutal, brócoli, espárragos trigueros, zanahoria, tres variedades de setas, pechuga de pollo que previamente va cocida y luego salteada, regado con salsa de soja y conjugado con pasta. Es uno de los mejores platos de pasta que tengo publicados, y eso que tengo bastantes. No sólo seduce por los ingredientes, sino por el colorido de los mismos, por lo que será un plato de éxito asegurado, ya me contaréis.
Este es uno de esos platos que nos entusiasmó en casa. Un guiso de sepia muy bien acompañado de alcachofas, pimiento rojo, patatas, tomate....lo malo es que es un plato para mojar pan, y mucho. Pero una forma de tomar la sepia o jibia de forma distinta a lo habitual. En casa sólo la tomamos a la plancha, frita o en salsa de almendras. Y todo maridado con uno de los AOVES que nos regalaron en GastroAOVE, Palacio de los Olivos. Un AOVE de muy buena calidad y más económico que muchos, 9 euros la botella de 500 ml. Se trata de un AOVE de la variedad Picual, procedente de Almagro (Ciudad Real), cuya nota de cata es frutado intenso, aceituna verde, presencia de hierba verde, tomate, alcachofa. En boca equilibrado con amargor y picante levemente perceptibles.
Ya os he ido dando pinceladas del fin de semana del 14 al 16 de febrero en Martos (Jaén), en el I Encuentro de Bloggers Gastronómicos Enamorados del AOVE, coincidiendo con la III Edición de #TwittsandAOVE, organizado por una de las personas que más sabe en nuestro país de AOVEs (Aceites de Oliva Virgen Extras), Rosa Marchal. Ya el año pasado cuando la conocimos en Gastrotur vimos que lo de Rosa y el AOVE era una verdadera historia de amor, aunque en aquel encuentro sólo pudiera hablarnos un poco del tema, pero ahora nos ha emplazado a su tierra para hacernos descubrir todo sobre la cultura del AOVE, ha conseguido enamorarnos a todos del AOVE, ha conseguido volvernos exigentes en materia de ACEITEs, y evitar que nos den gato por liebre. El sentimiento común de todos los asistentes al evento ha sido el convencimiento de que este fin de semana ha sido muy productivo y vamos a empezar a hablar con conocimiento de causa de los verdaderos AOVEs que tenemos en nuestro país. Vamos a aprender a maridar cada AOVE con diferentes recetas. Pero vamos a empezar por el principio. Viernes 14 de febrero, 18:30.
Hoy lunes os dejo una receta de bacalao para triunfar. Sin duda es una de las mejores recetas de bacalao que tengo publicadas. Lo tiene todo, rápida, fácil, cómoda de preparar, incluso un plato para sorprender a nuestros invitados por lo rápido que es de preparar. Aunque este tipo de platos tan simples y elementales sorprenden por la calidad de sus productos, el secreto está en un buen bacalao y, como no, en un buen AOVE, en este caso Cortijo La Torre. Estos lomos de bacalao yo misma los desalé, aunque si podéis conseguir unos buenos lomos de bacalao congelados en su punto de sal, también podréis usarlos.
Si alguien se pregunta cómo me organizo para decidir qué recetas publicar en un mes, tengo que decir que a veces soy muy ordenada y me apunto todas las recetas en la agenda, aunque luego no todas van saliendo, ya sea porque la receta decidida no haya salido bien, o porque no haya podido hacerla finalmente o porque tengas que preparar otras con las que no contabas. Y ésto me pasó con ésta. Nunca tengo suficientes pimientos amarillos para preparar una crema exclusiva de pimientos amarillos. Por aquí sólo los venden en bandejas tricolor, por lo que tendría que comprar cuatro bandejas para hacer esta receta. Pero el otro día mi amiga Ana Ruiz, como siempre que viene por aquí, viene cargada de pimientos. Me hace una ilusión tremenda ver esos pimientos perfectos en todos los aspectos, aunque la parte negativa es que tengo que ponerme a cocinar pimientos como una loca, je,je. Esta vez si he podido preparar esta crema de pimientos amarillos que ella misma tiene publicada en su blog, y que otra amiga, Ana María, también publicó en su día también con los pimientos de Ana. Además de la crema he preparado pimientos confitados, mermelada de pimientos rojos asados y mermelada de pimientos amarillos asados. Esta crema tiene el añadido de un AOVE almeriense de una calidad superior, La Solana2, del que más abajo os hablo un poco más de él. Se me ocurrió usarlo en esta crema por aquello de que los pimientos son de Almería y el aceite también tenía que serlo. El maridaje entre AOVE y recetas no lo hago con ningún sentido, porque aún tengo que aprender mucho en este campo, pero la verdad es que hasta ahora las combinaciones han sido estupendas, y en este caso también.
De nuevo reto del Asalta Blogs, este mes de nuevo especial para mi por la identidad de la asaltada, Bego, de Al Calor del Horno. Bego es de mis mejores amigas blogeras la primera que conocí virtualmente y luego ya han sido unas cuantas las veces que hemos coincidido físicamente, sin ir más lejos el fin de semana pasado estuvimos jutas en #GastroAove2014. Es un placer pasar un rato con ella y también por su cocina. Esta es una de las recetas que tenía en pendientes de su blog, ya sabéis lo amante que soy de la bollería, esa es una de las razones, pero además por tratarse de una receta típica de Cádiz, concretamente de Arcos, y Bego, siendo de Jerez, tiene muy presente porque son los bollos que le preparaba su tía Rosario. Los he preparado con un AOVE de los que nos regalaron el Gastroaove, concretamente con OleoCampo Alta Selección Premium. Debo de reconocer que son unos bollos que me han sorprendido, ya que daba por hecho que serían unos bollitos de pan de aceite con azúcar humedecido y almendra por encima. Pero lejos de ser sólo éso me ha parecido que son de los mejores bollos que he probado nunca, no se si es la calidad del aceite o qué ha sido....pero son realmente fantásticos, además son típicos de Semana Santa, por lo que vienen ideales para los días que se acercan. Lo que me sorprendió desde el principio es que sólo llevan un levado, largo de casi tres horas (en mi caso dos horas y media), pero sólo uno. Sólo tiene un inconveniente y es que son tremendamente adictivos. Con la cantidad de la masa que os pongo salen cinco, os recomiendo que dobléis cantidades, que si no os enteráis. Bego dice que aguantan más de una semana en bolsas de congelación, pero en mi casa no han durado tanto.
Como ya os comentaba el lunes, este fin de semana pasado en #GastroAove2014 una de las primeras actividades fue la del concurso de recetas de los bloggers participantes. Desde el principio se me metió en la cabeza llevar un carpaccio de gambas al concurso, aunque con la duda de si éste iba a resistir bien el transporte (por eso también preparé el paté de queso y AOVE, por si no llegaba bien el carpaccio). Lo mejor era que podía tener preparado el carpaccio dentro del congelador y transportarlo justo después de sacarlo de el congelador dentro de una bolsa térmica con una caja de hielo manteniendo el frío. Llegó en perfecto estado y al final fue el segundo plato más votado de la tarde, detrás de los bombones de AOVE de Mavi, de Cocidito de mi vida y por delante del paté de perdiz, de Carmina en la Cocina. Este carpaccio a mi personalmente me gustó muchísimo. Adoro las gambas y en crudo es como mejor se pueden tomar, y si además le ponemos un buen AOVE tendremos un plato de diez. Y es que también está aderezado con una sal de gambas de la que también os pongo la receta y que descubrí hace unos meses gracias a Marcos Pedraza, de la Ruta del Veleta, aunque yo la he preparado de forma distinta a ellos.
Aún con resaca de #GastroAove2014 y ya os traigo una receta donde uno de los protagonistas es el AOVE. Es largo de contar e intenso todo lo sucedido este fin de semana, y ya lo haré en un post exclusivo para la ocasión, aunque antes os daré algunas pinceladas. Una de las primeras actividades que teníamos en la agenda era la del concurso de recetas presentadas por bloggers. Podíamos llevar hasta dos recetas por blog y así lo hice yo. Los platos tenían todos un nivel estupendo, y, según comentó el jurado, la votación estuvo muy reñida. Mis platos fueron este paté de queso de oveja y AOVE y un carpaccio de gambas, con el que gané el segundo premio del concurso y que os enseñaré el miércoles. El verano pasado en una muestra de quesos andaluces en Salobreña descubrí un paté de queso de cabra curado totalmente artesanal. Según me comentó la mujer que los vendía se hacía con mortero, y sólo dos ingredientes básicos, queso y un buen AOVE (aquél también llevaba pimienta y ajo que yo no le he puesto). Hace unas semanas se me ocurrió que podía hacerlo y presentarlo al concurso, ya que nos había gustado mucho. Yo cambié el queso por uno puro de oveja curado, y aún nos ha gustado más casi que el original. Es muy fácil de hacer, sólo hay que tener la precaución de que el queso esté a temperatura ambiente y tener un buen mortero. Para la ocasión usé el AOVE OrOliveSur, variedad Picual, de la DOSierraMágina, envasado en la almazara Trujal de Mágina que tuve el placer de visitar en diciembre pasado.