Para estos calores lo mejor es tomar postres muy refrescantes y además que no nos den mucho trabajo, este en concreto es un postre de aprovechamiento puesto que lo hice para aprovechar un resto de leche condensada que me sobró de otro postre. Con estas cantidades salen 4 vasitos, pero si queréis más cantidad sólo tenéis que doblar cantidades.
INGREDIENTES:
- 200 gr. de leche condensada
- 200 ml. de nata para montar
- 4 hojas de gelatina neutra
- 100 ml. de leche
- Para decorar:
- Frambuesas
- Unas hojitas de hierbabuena
PREPARACIÓN:
Hidratamos 4 hojas de gelatina en agua fría durante cinco minutos. Después disolvemos en la leche caliente.
Montamos 200 ml. de nata con la ayuda de unas varillas eléctricas, cuando esté casi montada vamos añadiendo la leche condensada. Una vez montada añadimos la leche con la gelatina ya disuelta y la integramos con movimientos envolventes.
Rellenamos 4 vasitos con la mezcla y dejamos cuajar 4 horas mínimo en el frigorífico, lo ideal será que se trate de frigoríficos no frost. Después, a la hora de servir sacamos del frigorífico y decoramos cada vasito con unas frambuesas y unas hojas de hierbabuena fresca.
Espero que os animéis con estos vasitos porque son una auténtica delicia, ya me contaréis.
